Sunday, December 15, 2013

Sobre ese asunto de agradar a los demás.

Tal vez sea muy sensible  o todo lo contrario y todo lo demás. Pero, ¿qué más da? La sinceridad a veces paga un alto precio al igual que el despertar: en muchas ocasiones te distancia de los demás.  

Si nos detuviéramos a pensar un poco antes de tomar una decisión, adoptar un comportamiento o acoplarnos a lo que entendemos y a la vista agrada a los demás;  en efecto lograríamos esa anhelada conexión con los demás y afectarlos de una manera positiva. El poder de re-contextualizar las cosas no se debe exagerar. Mucho menos subestimar el alcance e influencia de nuestras acciones y actitudes, más de aquellas sin fundamento  y como olvidar la cadena de las malas interpretaciones que tienden a generar. Y ese efecto contagio de lo malo, la hipocresía a la potencia  y el fervor de lo banal.

La importancia de lo que acontece, de las situaciones en que nos vemos involucrados no depende mucho de lo que en verdad son, sino de la a veces terrible dualidad: cómo lo vemos,  la interpretación y magnitud que decidimos darle; por otro lado la presión social, el cómo lo mire la sociedad y lo que puede que digan. Lo que hace toda esa influencia de la sociedad  y esa búsqueda de aceptación un tema espinoso, porque está directamente atado a con quien decidimos relacionarnos que a veces en vez de ayudarnos nos menoscaban.

 Lo triste es el efecto absurdo que muchas veces  tienen las impresiones sobre nuestro proceder.  Es esa tendencia a copiar el comportamiento de otras personas de forma casi gregaria la que nos aleja de conocer nuestras fortalezas y utilizarlas  “a favor de” y  “para agradar/pertenecer a”   algo que en creces nos supera.   Qué pena que lo que se haga viral sea esa obediencia sin razones, por creer ciegamente que nos acerca a una vida placentera y que contrariamente nos hace olvidar del dedicarnos a ser felices. Y que nos seduzca esa idea de que debemos encajar y olvidarnos de las perspectivas y  de pensar. 

Monday, December 09, 2013

Amores de un soñador activo

De esos amores tercos que se vuelven mudos y aprenden braille sobre tu anatomía. De unos dedos en fuego y sincronía. Se apaga el cielo y baja el sol a tu edredón. El insomnio de tu sueño se posa en mi colchón. 

De esos amores que nadan en las pupilas.Y este deseo anfibio corre hasta el latido buscando simetría. Del destino de unos besos que se abren en tu piel camino. Se bordan a tus sentidos y atan tu universo del mío. 

De tu lengua que juega a ser cartero al encontrarse con mi tacto. Y tu susurro que trepa desde mi cuello al pensamiento de dejarte sin abrigo. De esos amores locos y sin sentido y de un soñador activo....